MI VIAJE EN EL COLEGIO
29 de May 2015
Han pasado unos meses desde el inicio del año escolar donde el llanto de nuestros nuevos pumitas de 2 y 3 años de edad era recurrente, debido a la angustia que les provocaba el separarse de sus padres.
Podemos señalar al respecto que a mayor edad menores son las dificultades que presentan los niños para enfrentarse a situaciones nuevas, dado que pueden expresar cada vez mejor sus sentimientos mediante el lenguaje, pero una buena integración también depende de la actitud de los padres (no flaquear y confiar), así como de las habilidades de las educadoras, ya que es especialmente importante, mantener una actitud positiva y un estado de ánimo alegre y enérgico con el fin de crear un ambiente distendido, de confianza y estimulante desde un principio. De eso depende en gran parte la motivación y participación activa de nuestros niños durante la jornada.
Invitamos a nuestros padres a hablar con sus hijos, felicitarlos por sus logros, mostrar interés por lo que hacen y fomentar en ellos la autogestión.
Ya no se escuchan llantos y solo se ven sonrisas por nuestros pasillos, nuestros niños participan con mucho entusiasmo de las distintas experiencias y actividades que las educadoras preparan día a día para ellos.
Los invitamos a ver algunas imágenes