Nuestro equipo psicoeducativo inició el ciclo de charlas para nuestras familias en el marco del Plan de Contención Emocional 2020.

Les entregamos recomendaciones para el buen uso y manejo de aplicaciones de redes sociales en los diferentes dispositivos para sus hijos.

Después de meses de confinamiento en casa, el retorno a clases presenciales, sumado a un nuevo contexto de “normalidad”, podría generar reacciones emocionales de diversa índole en niñ@s y adultos, por lo cual nos parece oportuno entregar la siguiente información a las familias a fin de orientarlas, contenerlas y apoyarlas en este proceso de preparación.

Cuando el fallecimiento se ha producido, no demorar la noticia y explicarles lo que ha ocurrido. Los niñ@s no deben ser excluidos de la realidad que viven, lo adecuado es que se les informe y que ellos elijan si desean o no participar y de qué manera.

En la primera infancia, los niños comienzan a adquirir la capacidad de reprimir los impulsos de agresión física (como empujar, golpear, pellizcar, morder, gritar, etc.) cuando están enojados. Los niños en edad preescolar aprenden a identificar los estados emocionales básicos, en ellos mismos y en los demás, mediante el uso de la palabra.

Uno de los principales desafíos que nos plantea el período de cuarentena es el de ampliar nuestra mirada hacia el macrosistema del cual somos parte. De pronto, las decisiones que tomamos por el bien y la seguridad de nuestros seres queridos se convierten en decisiones para el bien de nuestra ciudad, nuestro país y muchas personas que no conocemos.

Nuestra red educacional está comprometida con el mantenimiento de altos estándares de bienestar en nuestros estudiantes, para lo cual ha definido cinco ámbitos que deben ser fortalecidos y desarrollados: “El sueño”, “Vida Saludable”, “RRSS y tiempo en pantalla”, “El cerebro y tu bienestar” y “Es bueno hablar”.

Si bien el tiempo de cuarentena ha sido un período complejo y de grandes desafíos para todos, queremos mirarlo como una oportunidad de aprendizaje que nos lleve a valorar más que nunca a la familia y como una instancia de reencuentro valiosa que permite fortalecer nuestros lazos.

La situación de distanciamiento social, debido a la emergencia sanitaria, ha obligado a las familias a coincidir en tiempos y espacios que no necesariamente existían. Dicha convivencia puede ser experimentada como más o menos compleja, pudiéndose generar situaciones de tensión. Le presentamos las herramientas más adecuadas para gestionar y prevenir posibles conflictos.

Existen diferentes técnicas disponibles para conectarse con uno mismo, inspeccionar cómo estamos, cómo nos sentimos, identificar y regular nuestras emociones. Dentro de ellas podemos destacar una especialmente, que se utiliza para regular nuestros estados de ansiedad, estrés, enojo o inquietud: el Mindfulness.

En el contexto que vivimos se hace incluso más necesario darle un nuevo valor al tiempo y a los vínculos en la dinámica familiar. A continuación se presenta una serie de actividades orientadas a propiciar espacios de esparcimiento que promuevan emociones positivas.

La falta de actividades al aire libre, el aislamiento y la dificultad de realizar ejercicio físico puede llegar a afectar el estado emocional de los integrantes de la familia, aumentando su irritabilidad y estrés. En este período podemos notar los siguientes cambios en los niñ@s y jóvenes.

Como red educativa hacemos un llamado a aprovechar de manera responsable todos los beneficios que nos puede traer, en las circunstancias actuales, un buen uso de las redes sociales y la tecnología. Es esencial tener consciencia de los riesgos que pueden conllevar, enfatizando con nuestros hijos en la importancia de mantener relaciones sanas y de buen trato. La recomendación es educar en su correcto uso para aprovechar todas sus ventajas.

En el caso de los niños y niñas, es muy relevante poder reflexionar sobre a qué información les exponemos, y transmitir sólo lo necesario para su entendimiento, sensibilidad y nivel de comprensión, de forma adaptada a su edad. En este sentido, es importante considerar que inundarlos con información que no puedan procesar
los podría agobiar y generar comportamientos más complejos de abordar para los adultos.

En esta contingencia mundial las clases online se han vuelto indispensables y muy eficaces para la continuidad educacional de nuestro colegio. En el caso de los niños y adolescentes, la falta de una adecuada atención por parte de los adultos les deja aun más vía libre para acceder sin control a internet.